La Catedral de Milán, más conocida como Duomo, es una enorme catedral gótica que se encuentra emplazada en el corazón de ésta ciudad. Al salir de la galeria Vittorio Emanuelle se puede ver inmediatamente ésta maravilla arquitectónica.
Con 157 metros de longitud y espacio para más de 40.000 personas en su interior, el Duomo de Milán es una de las catedrales católicas más grandes del mundo.
Mención aparte para los pisos de mármol.
El interior presenta un aspecto estilizado y amplio gracias a las largas columnas de mármol con estatuas talladas que llegan hasta el techo.
Los vitrales que nunca dejan de sorprenderme.
Lo más atractivo para nosotros y que no quisimos perdernos, era subir a la terraza panorámica.
Es posible acceder tanto a pie,utilizando unas escaleras bastante cómodas, como utilizando el ascensor, nosotros preferimos utilizar las escaleras para ir disfrutando paso a paso todo el itinerario
Yo estaba fascinada de ver éstos detalles tan de cerquita!Con ganas hasta de tocar, ésta terminaciones en cemento de Flor de lis.
La terraza de la parte superior de la catedral ocupa prácticamente toda la superficie del tejado y ofrece la posibilidad de pasear por las alturas mientras se contemplan las preciosas vistas de la plaza y la ciudad.
También resulta interesante como les decía, la visión tan cercana de los detalles arquitectónicos: pináculos y esculturas del tejado...es mágico estar ahí arriba, casi indescriptible!
El imponente edificio de ladrillo revestido de mármol, se ve culminado con infinidad de éstos pináculos y torres coronadas por estatuas que contemplan la ciudad.
El punto más alto del templo, es la estatua de cobre dorado esculpida en el año 1774, conocida como la Madonnina que se puede ver en la siguiente fotografía, al fondo y arriba.
(Aqui un poquito más de cerca)
Estar parada sobre la cumbrera del tejado es casi increíble, pero fue real.
Enfrente a la iglesia (los invito ver bien al detalle en la foto) se ve la terraza de la Rinascente ( department store) que regala otras vistas privilegiadas hacia la Catedral aquienes disfrutan de un almuerzo o merienda.
También vemos allí abajo... la galeria Vittorio Emanuelle.
Acá mi mamá, asomada desde la terraza y disfrutando de toda ésta belleza!
El paseo por las alturas de la Catedral dura una media hora, luego emprendimos la bajada también por las escaleras.
Y por la noche, volvimos a caminar por la zona y con la sopresa de encontramos allí mismo, con un evento de música de MTV, que nos regaló un entorno musicalizado y vistas iluminadas y coloridas de la fachada de la iglesia.
Miren que belleza, realzada por tanto color.
La luna, nos acompañó en ésta noche mágica en la ciudad italiana, capital de la moda.
Si visitan Milán proximamente, ya saben: no dejen se subir a las terrazas del Duomo y después me cuentan!
Hasta pronto!
Marce